Jesús continúa con sus enseñanzas sobre los pilares del reino de los cielos hablando ahora sobre la venganza, el odio y el amor a todos – incluso quienes nos hieren.
»Ustedes han oído que se dijo: “Ojo por ojo y diente por diente.” (Éxodo 21:24; Levítico 24:20; Deuteronomio 19:21) Pero yo les digo: No resistan (se opongan) al que les haga mal (les hiera). (Sino que…) Si alguien te da una bofetada en la mejilla derecha, vuélvele (ponle) también la otra. Si alguien (decide, determina, desea) te pone pleito (condenarte, llevarte a juicio) para quitarte (y se apodera de tu) la capa (túnica), déjale (envíale) también la camisa (el vestido). (Y quien sea que) Si alguien te obliga (ser mensajero, presionar a un servicio público) a llevarle la carga un kilómetro, llévasela (ve con él, acompáñalo) dos. Al que te pida, dale; y al que quiera (determine, desee) tomar de ti prestado (también a interés), no le vuelvas (des) la espalda.
¿Qué enseñaba el AT sobre la venganza? ¿Qué cambia Jesús en esa enseñanza? ¿Por qué?
¿Qué ejemplos da Jesús sobre cómo reaccionar en diferentes casos? ¿Cómo demostró Jesús en su propia vida que cumplía con esto mismo?
Según Jesús, ¿cómo debemos actuar en los casos mencionados? ¿Por qué es tan difícil? ¿Qué necesitamos para poder cumplir con este mandato del Señor y ser dignos ciudadanos del Reino?