“Si algún libro en la Biblia puede mostrar de manera
real, íntima y cercana el corazón, el amor y la pasión de Dios por Su creación,
solo es uno: el libro de Juan.”
Coach David Roncancio
Quiero iniciar una serie de estudios bíblicos iniciando
por tal vez el más preciado de los libros en la Biblia: el libro de Juan. ¿Por
qué Juan, se preguntara usted? Porque Juan fue probablemente el discípulo más
cercano a Cristo. No solo fue un amigo más, fue posiblemente su amigo más
íntimo. Juan conoció más del corazón de Dios y de su amor por nosotros a través
de su cercanía con Jesús, que cualquiera de los otros discípulos. De ahí que
Juan haya escrito tanto sobre ese tema especialmente en sus cartas a la
iglesia.
Antes de iniciar con el estudio del Evangelio de Juan, comencemos por conocer a su autor. Juan, también conocido como Juan el Apóstol, era un ciudadano judío, que vivió aproximadamente entre el año 6 y el año 101 después de Cristo. Nació posiblemente en Betsaida en Galilea y era hijo de Zebedeo y hermano de Jacobo (Santiago) el Apóstol. Su nombre es judío y significa: “Jehová es misericordioso”. Juan y su hermano eran pescadores en el lago de Galilea, junto con Pedro y Andrés, quienes llegaron a ser los primeros 4 discípulos de Jesús. De acuerdo a Marcos 1:16 al 20, ellos, junto a su padre Zebedeo, eran empresarios, dueños del negocio de pesca, pues podían contratar a otros. De acuerdo a lo que se puede inferir de los Evangelios, la madre de Juan fue Salomé.
Juan, Jacobo y Pedro llegaron a ser parte del círculo más cercano de Jesús, siendo Juan tan cercano que fue considerado el “discípulo amado” – Juan 21:24. Debido a su fuerte temperamento y el de su hermano, Jesús les puso de sobrenombre: Boanerges, que significa “hijos del trueno”. Juan y Jacobo son inicialmente seguidores de Juan el Bautista, hasta que Jesús les llama a seguirle.
Juan escribe además del Evangelio de Juan, las cartas conocidas como 1., 2. y 3. de Juan, y el Apocalipsis. Se cree que escribió el libro de Juan entre el año 85 y el año 96 después de Cristo.
Hacia el final de su vida, Juan es encarcelado y exiliado a la isla de Patmos, en donde recibe una visión que es la base para el libro de Apocalipsis. De todos los apóstoles, se cree que Juan fue el único que no murió como mártir, sino de muerte natural, después de haber regresado de su exilio a Éfeso, en donde se cree fundo la iglesia local.
Con respecto al libro o evangelio de Juan, este cubre un espacio de aproximadamente 3 años y medio, entre el año 29 y 33 después de Cristo. El estilo de Juan es completamente diferente al de los otros evangelios, pues Juan se concentra en la personalidad de Cristo más que en sus enseñanzas o milagros. El libro de Juan fue escrito probablemente en Éfeso, donde Juan colaboraba pastoreando a la iglesia allí naciente. Está dirigido principalmente a los gentiles (los no judíos de esa época) y a la iglesia cristiana en general.
El libro de Juan está dividido principalmente en seis partes:
1.
La
encarnación del Hijo de Dios, que va desde Juan 1:1 hasta el 1:14, y
básicamente explica como Dios se hace hombre.
2.
Una
introducción al ministerio público de Jesús, que va desde Juan 1:15 hasta el
5:15, y básicamente trata de como Jesús inicia su ministerio y las razones para
hacerlo. Es allí donde encontramos el famoso versículo sobre el amor de Dios –
Juan 3:16.
3.
La
oposición que se inicia al ministerio de Jesús, que va desde Juan 5:16 hasta el
12:50.
4.
La
preparación de Jesús de sus discípulos para su traición y regreso al cielo, que
vas desde Juan 13:1 hasta el 17:26, y que incluye la famosa oración hecha por
Jesús por sus discípulos y las generaciones venideras.
5.
El
arresto, juicio y crucifixión de Jesús, que va desde Juan 18:1 hasta el 19:37,
y del cual se puede inferir que solo Juan permaneció con Jesús durante esos
momentos en los cuales el resto de discípulos, incluido Pedro, ya habían huido.
Juan logra estar presente en el juicio debido a que era conocido del sumo
sacerdote.
6.
La
sepultura y resurrección de Jesús, que va desde Juan 19:38 hasta el 21:25, y
que incluye el conocido pasaje de la restauración de Pedro.
En el próximo Blog empezaremos estudiando y analizando el primer capítulo del libro de Juan. Hasta entonces los espero, y les deseo muchas bendiciones.
